No podría haber elegido a una mejor profesional: atención, asesoramiento, calidad del servicio… Y no solo con mi maquillaje de novia, sino también con el peinado y los complementos. Totalmente equipada, cuida hasta el último detalle, y lo dice alguien a quien no se le escapa nada y que es muy exigente consigo misma y con los demás. Sin duda alguna, Lydia estuvo a la altura! No podría haber tomado una mejor decisión.